23 de marzo de 2019
El Frente Antiimperialista exige la liberación inmediata de los abogados revolucionarios y progresistas en Turquía.
Las decisiones de los tribunales del fascismo son nulas y sin valor. Esta es la justicia de clase, en este caso la “justicia” de un sistema que ni siquiera presta atención a sus propias leyes. El tribunal recurrió a “testigos secretos”, una tendencia de los últimos años en Turquía que niega a los acusados la presunción de un juicio justo. Ningún poder judicial, ninguna ley, puede juzgar la legitimidad de los abogados revolucionarios. En lugar de ser un abogado para llevar una vida cómoda, fueron condenados a penas de entre 3 y 20 años por estar en contra de la injusticia, por la justicia y el honor y por abogar por el pueblo. En Turquía, el castigo tiene como objetivo intimidar a los revolucionarios que luchan por la justicia para el pueblo.